Dulces sueños

A veces me siento como un pez fuera del agua… después me miro los pies y comienzo a caminar… sin lugar… sin ninguna prisa aparente o que deje de serlo… simplemente sigo mis pasos uno detrás de otro con la música en mis oídos…

 

A veces voy deprisa… esas, no recuerdo si voy tocando el suelo o flotando en el aire… todo se funde a mi vera y los colores parecen centrifugados, un rato después ya no se si lo que he vivido era real, pero estoy a tantos kilómetros del origen que me preocupo mas en volver que en razonar mi recorrido… en cambio prefiero aquellas ocasiones en que todo va tan despacio que las alas de las moscas no hacen ni una batida… todo el sonido es un zumbido indefinido y las gotas de luz salpican por todos los rincones… en ocasiones solo, y en otras acompañado de todas las sombras de los presentes… pues no hay que olvidar que siempre hay una con nosotros, solo hay que saber mirar y encontrar el momento…

 

Yo ya no recuerdo a la mía… siempre hemos estado en conflicto por eso… ella prefiere otros caminos… sobretodo los que no tienen alturas porque realmente le jode no estar al mismo nivel que las circunstancias y sobretodo porque odia ser una paradoja de un ser como ella define de tan esencial…

 

No discutimos… nunca lo hemos hecho porque por mucho que se intente es inútil hablar a una sombra… tan solo tomamos direcciones opuestas y apostamos quien llega primero a la meta… todo hay que decir que en ocasiones, y por muy penoso que suene ha llegado antes que yo… pero siempre sabe esperarme con una sonrisa y buenas maneras… nunca le cuento que es porque me cruzo con buenas historias por el camino… ella se reiría y diría que ninguna es tan buena como para eclipsar su victoria… pero los dos sabemos que hace trampa saltando de un edificio a otro… supongo que tengo celos de no ser una sombra… pero que demonios tener forma definida también tiene su cosa…

 

Así que a veces estoy solo y otras mal acompañado… cuando suenan las 12 de la noche ninguna compañía es tan mala como si fueran las 12 de la mañana… por la noche todo se suaviza y las sombras son libres de ir a donde quiera que van las sombras al caer el sol… sus sustitutas nocturnas son algo mas esquivas y van de bombilla en bombilla como Tesla seguirá eternamente a Edison… algunas cosas nunca cambian y otras siguen evolucionando…

 

Yo sigo intentando buscar las respuestas cuando las horas comienzan de nuevo su deambular funesto… sin agobios ni prisas porque aun la cruz del día no ha sido impresa y hasta entonces aun tenemos tiempo para confundir una patata con una batata, o aun pero con una pera… pero cuando el pitido final suena, ya no queda nada… ni lamentos, ni lagrimas, ni sentimientos compungidos… comienza un nuevo día y todos se afanan en sus sueños por restituir la realidad en trozos pequeños… los malditos intentaran estrujar un par de vasos mas antes de caer en la cama rendidos y ebrios por haber llegado una vez a salvo a sus respectivas casas… otros se quedaran colgados de la luna hasta llegar a sus catres y los que no viajaran dormidos pues que hay mejor que hacer?...

 

 

Yo sigo apuntando mis días con letras pequeñas, en los laterales de los libros… en las márgenes de las servilletas… luego las escondo por todos los agujeros que se han hecho en el día y así evito caer en los mismos errores…

 

En ocasiones he muerto con alguna mina… por suerte todas mis palabras siguen un orden y vuelven a juntarse… a nadie le importa perder una pierna si no es viernes por la noche o domingo por la mañana…

 

Todo tiene menos sentido contra mas se lo buscas… cuando solo queda silencio, todas las respuestas son mas fáciles de escuchar y el ego que ha crecido a lo largo del día es talado por los sueños afilados que vuelan por las carreteras… no olvido los recuerdos salvo cuando nado entre tiburones y al menos en ese momento me encuentro vivo en el presente… los mordiscos son como imágenes que se clavan una vez y después cicatrizan… no hay dos dientes iguales en la boca de un pez que devora tantas cosas a lo largo de la vida… pero sonrió cuando al menos cuando los bocados pequeños llenan todo de notas de color… es mejor morir en un arco iris que con el culo helado en las profundidades… solo es cuestión de criterios… la elección del nuevo día llega con el atronador sonido del despertador, he sobrevivido una noche mas en los sueños de algún suicida… tratare de encontrarle y darle cuchillas sin filo para que por la noche llorando recuerde que al día siguiente tiene que bajar a hacer la compra…

 

He soñado con volver a disparar palabras… comprobado las pistolas y quitado el seguro… mañana por la mañana no seré Billy el niño… pero al menos lo he dejado escrito por si no vuelvo a encontrarme conmigo.

 

Apunto… acaricio el gatillo y todas las palabras salpican las sombras de las paredes… con un poco de suerte conciliare el sueño y alguien al amanecer arreglara el desastre de mi cabezas… quizás mañana… quien sabe, puede que sea capaz de colocarlas… yo solo puedo asegurarte que dormido todos los problemas suenan a ronquidos…